
La medicina legal o forense es una ciencia fascinante y de mucha importancia, que requiere profundos estudios e investigaciones, principalmente, por su aplicación en el campo de la administración de justicia. En los primeros tiempos de la medicina legal científica, la autopsia era quien proporcionaba las evidencias de la muerte de un individuo y se decía que el “cadáver habla”. Por esta razón la muerte es un hecho que genera consecuencias jurídicas que afectan profundamente a la vida de que quienes sobreviven, tanto en el aspecto emocional como en el económico y familiar. Por ello, la incertidumbre es algo que debe y puede ser evitado mediante el manejo adecuado de los cadáveres.